Recuerdo del primer mensaje :



El extraño

Trycany, al Noroeste del planeta bautizado hace milenios como Kerberos 18


Mapa de Kerberos 18

Este mundo fue una majestuosa utopía por mucho tiempo; las especies vivían en paz y en armonía, no había disputas políticas, ni problemas económicos o ambientales. La guerra era algo inimaginable en un sitio como Kerberos 18, pero... ninguna civilización puede escapar de la maldad por siempre.

Hace exactamente 6 años, una raza alienígena arribó a Kerberos 18 con promesas de prosperidad y conocimiento ilimitado; los Zamthon. Al principio parecían amigables, pero luego de un tiempo sus verdaderas intenciones fueron descubiertas. Lo que buscaban era neutralizar a la especie predominante; los Ávilat. Una vez cumplido su macabro objetivo, no se sabe que planean hacer con K-18.

Desde entonces, la guerra y muerte han sido una rutina infernal para los habitantes de este mundo. Lo único que podían hacer los Lideres de Ávilatianos era defender a Kerberos 18 de los brutales ataques reclutando a hombres, de diversas partes del mundo, para combatir en la guerra de Guelis (lugar donde estaba altamente concentrada la raza enemiga).

Mi padre, Joe Smith Lee, fue convocado para participar de la guerra hace 2 años. Juró que defendería a nuestra raza con todas sus fuerzas y que volvería cuando la guerra haya terminado, pero esto ultimo parece solo un sueño que habita en las mentes inocentes de los niños mas pequeños, pero aún así, a veces me gustaría creer que hay una salida. Rhine Stuart Lee es mi nombre, vivo junto a mi madre, Esmeralda, y con mi hermano, Shin. Ahora estamos solos, viviendo diariamente el miedo de que al día siguiente despertemos muertos. Rezándole a un dios que nos ha abandonado, para no caer en desgracia.

Hace 8 meses, el Presidente Gaia Bornotte intentó realizar un acuerdo con los Zamthons.

"Esta guerra está durando mas de lo que ambas especies pensamos desde un principio. Miles de Ávilatianos y Zamthons han perdido sus vidas a lo largo de todo este tiempo. Les pido, por favor, que acaben con este enfrentamiento. A cambio de su ida de este planeta, les daremos lo que busquen; Minerales, Joyas, Alimentos, lo que quieran". Por desgracia, la hostil raza extraterrestre se negó rotundamente a cualquier tipo de acuerdo, y continuaron con sus constantes ataques a las ciudades mas importantes de Kerberos 18, entre ellas Tricany, Hostirch y Alkrania.

Una vez por mes, nuestro padre nos enviaba una carta contándonos sucesos que ocurrían en Guelis y las horribles cosas que veía durante su estadía allí, también decía que nos extrañaba mucho y que se preocupaba por nosotros al ser nuestra ciudad una de las zonas de peligro, pero desde hace unos meses, han dejado de llegar sus cartas. La semana pasada, Shin y yo estábamos jugando fuera de la casa mientras nuestra madre tejía, cuando de pronto un coche paró en frente de nuestro domicilio, el que bajó del auto era un amigo de nuestro padre que lo acompañó en la guerra. Mamá dejó de tejer y fue a atender al señor, que se encontraba en la entrada con una mirada llena de tristeza. Shin y yo nos acercamos para saber que noticias venía a darnos. A mi madre le informó lo siguiente: "Su esposo, Joe Smith Lee desapareció en Combate, lo lamento mucho", luego de enterarse de la trágica noticia, nuestra madre estalló en llanto, mientras nosotros tratábamos de contenerla.

Mi hermano y yo no podíamos creerlo, nos quedamos sentados en el suelo por varios minutos en frente de nuestra madre, que se hallaba completamente muda. "Espero que solo sea una pesadilla" murmuré. "Papá...papá...dijiste que volverías...¡lo prometiste!" dijo Shin sollozando. Tras unos minutos nuestra madre rompió el silencio. "No pierdan las esperanzas hijos...no está muerto, solo se encuentra desaparecido en combate. Su padre es un hombre fuerte, confíen en mi..el sigue vivo". hubo un silencio conmovedor, y lentamente, con lagrimas brotándonos de los ojos, fuimos y la abrazamos mientras le respondíamos "Te creemos".

Mas tarde ese día, mi hermano y yo paseamos por el campo que hay detrás de nuestra casa para charlar.

- ¿Crees que esto alguna vez termine? ¿Volveremos a ver a nuestro padre? Preguntó Shin

- Eso espero...quiero dejar de sufrir de una vez, y que papá esté aquí para protegernos. Le respondí

Continuamos vagando por el campo hasta que comenzó a anochecer y una densa niebla se hizo presente.

- Deberíamos volver a casa...¿no crees? Le pregunté a Shin.

- Si, pero antes debo contarte algo. Me respondió.

Shin y yo nos recostamos sobre el tronco de un Róbulo cercano (una especie de árbol bastante grande), y se dispuso a hablarme sobre una chica que le gustaba mucho y que vivía cerca de nuestra casa. El problema es que Shin es bastante tímido y tardará mucho en decirle a la chica que siente algo por ella.

- Dejame entender...estamos a mitad de una guerra y tú te pones a pensar en MUJERES.

Shin lanza una risa incomoda y luego se queda en silencio unos momentos.

- Vamos Rhine...dejame despejar la mente de toda esta mierda de los Zamthons..

- Hmmm...sabes qué? te apoyo Shin. Debes aprovechar el tiempo con ella, nunca sabes lo que puede pasar mañana.

- Gracias...trataré de acabar con mi timidez. Dijo Shin con una sonrisa.

Por cierto, tu tienes muchas amigas guapas, nunca entendí por qué no tienes novia.

- Ya te lo he dicho, Shin. No es el mejor momento para amores.

- Si tu lo dices...pero no esperes que estén disponibles por siempre. Dijo Shin

Luego de nuestra conversación volvimos a casa. Allí se encontraba nuestra madre, completamente preocupada por nuestra larga ausencia. Ella pensaba que nos habían secuestrado (cosa normal ya que últimamente gente ha desaparecido sin dejar rastro). "No vuelvan a salir de noche, es muy peligroso y lo saben muy bien" Dijo ella.

- Ya lo sabemos..¿Pero qué importa? Respondí algo enojado.

Papá se ha ido...y tal vez no vuelva, me siento impotente, débil..solo. Bajo la mirada e intento no llorar.

- Hijo...por favor entiende

Mi madre se para en frente de mi y me toma de los hombros.

- Estamos solos ahora, y tu padre no está, pero no debemos rendirnos.

Debemos tratar de estar unidos, tenemos que superar nuestros problemas..juntos.

- No estas solo Rhine, nunca lo estarás. Dijo Shin

Entonces yo sonrío, y mi hermano y mi madre me abrazan con cariño.

Al día siguiente, nuestra madre se enfermó sin previo aviso, algo realmente extraño ya que ella casi nunca contraía virus ni otros tipos de malestares. Cada vez que intentaba moverse se sentía gravemente adolorida y exhausta. Nosotros hacíamos todo lo posible para que no haga esfuerzos innecesarios; barríamos, lavábamos la ropa y cocinábamos. Tratamos con diversas medicinas caseras y algunas obtenidas del mercado, pero ninguna lograba hacerla mejorar.

Pasada una semana desde la triste noticia sobre nuestro padre, avanzamos a los sorpresivos sucesos de hoy. Shin y yo estábamos limpiando el frente de la casa, cuando milagrosamente, nuestra madre se puso de pie luego de muchos días de reposo. Ella se sentó en una banca que se hallaba en la entrada de la casa y nos observó.

- Luego si pueden cosechen las verduras. Para estas fechas ya están maduras. dijo ella

Mi hermano y yo asentimos con la cabeza, y dejamos de limpiar para irnos a cosechar los vegetales. Por suerte las demás verduras también estaban maduras y listas para comer; Zames, Photas y Jelzes, se pueden hacer gran variedad de comidas nutritivas con ellas.

Cuando terminamos de cosechar los vegetales, fuimos de nuevo al frente de la casa, y allí estaba nuestra madre, charlando con un hombre de apariencia extraña. El sujeto llevaba una chaqueta gris oscura y sombrero del mismo color, ojos verdes y un raro medallón que tenía el numero "23". Cuando el extraño nos vio nos exclamó "¡Eh jóvenes! ¡debo hablar con ustedes!", con una sonrisa bastante perturbadora.

¿Cuáles eran las intenciones del extraño? Nuestra madre no estaba nerviosa en lo absoluto, y parecía conocerlo.

Por ello no dudamos en acercarnos a él y saber que estaba ocurriendo.

Continuará.

Antes del rework:

''Vamos a los arbustos, que te daré un regalito. Dijo Arwen con sensualidad.''

Voy a ir al Digimundo en la ficción Me ha encantado Rhine

La verdad

- Digi, las cosas no pasaron así...y lo sabes muy bien. Dijo Wig interrumpiendo su relato.

- ¿Q-qué? ¿Y tu que sabes? no estuviste cuando todo ocurrió. ¿O acaso ademas de profeta eres omnisciente? Preguntó Digi, mientras se mostraba ligeramente ofendido.

- Já...no necesito ser omnisciente para saberlo, Digi. Cada expresión facial que has denotado de manera inconsciente mientras contabas lo que ocurrió puso en manifiesto tus mentiras.

El joven de piel rosada queda impresionado por las observaciones que Wigozerus hizo, al mismo tiempo en que se mostraba avergonzado y entristecido.

- Ok...la verdad es que Arwen y yo nunca pudimos recuperar el Teletransportador. Reveló Digi, mientras bajaba su mirada y se disponía a contar el verdadero final de su historia.

-Se vuelve a la parte en que son sorprendidos por el Sargento-

- ¿Acaso pensaban utilizar ESTO? Preguntó el Sargento apuntando hacia el artefacto.

- Que pena...este generador de portales podría ser peligroso en las manos equivocadas.

El militar mira detenidamente los botones del tan preciado control, tratando de adivinar cual será el que permita abrir el portal hacia la otra dimensión. Sin éxito, vuelve su mirada hacia Digi y Arwen, quienes se encontraban mudos en el suelo, sin ninguna idea de que hacer para escapar.

- ¿Qué vamos a hacer? ... Le Murmuró Arwen a Digi.

- No lo sé...tal vez si nos movemos nos matan sin piedad alguna. Murmuró Digi.

El temible Sargento se da cuenta de que ambos murmuran, y éste se posiciona en frente de ellos.
El los observa con una mirada tan fría que podría helar fácilmente la sangre y asustar hasta al mas cruel de los psicópatas. Luego de unos cuantos minutos, dejó de mirarlos fijamente, y volvió su mirada al control.

- Será mejor que me lleve este extraño artilugio a las instalaciones militares para algunas "pruebas".

- ¡Oh! Exclamó uno de los soldados detrás del Sargento.

- Podríamos llevar a este par de idiotas allí para hacer "pruebas" con ellos también, ¿no cree?

- Excelente idea. Dijo el Sargento, mientras observaba al par de Orivadenses aterrorizados.

De pronto, unos fuertes estruendos de bombas irrumpieron en la escena. Al parecer algunos rebeldes que estaban al tanto de la situación decidieron aprovechar y atacar a los militares mientras se hallaban distraídos. Digi y Arwen, sin mas remedio, debieron abandonar la zona de fuego para sobrevivir el ataque.

Ambos, ya bastante alejados del lugar, pudieron divisar justo el momento en que una colosal explosión de fuego destruye todo lo hallado en la zona en que se encontraban minutos antes.

Los compañeros Orivadenses se sientan en el suelo, frustrados por el enorme fallo en sus planes. Lo único que podían hacer en ese momento era mirar como el fuego y el humo de la explosión se disipaban por el cielo de Kerberos 18.

- Parece que ya no podremos rescatar a Totoi del Digimundo.. Dijo Digi, con lagrimas en sus ojos

- No ahora, pero lo haremos, juntos. Te lo prometo. Dijo Arwen, mientras abrazaba a su compañero.

Desde entonces, los caminos de Arwen y Digi no se volvieron a cruzar.
Por varios meses Digi se culpó a si mismo por no haberle arrebatado el artefacto al Malvado Sargento antes de que todo explotase por culpa de los Rebeldes. Pero de todas formas gracias a ellos se salvaron de ser los conejillos de indias de los crueles militares.

- ¿Hace cuanto tiempo ocurrió todo eso que cuentas? Preguntó Shin.

- No lo sé...desde entonces me he mantenido oculto, no puedo salir del planeta ni hacer alguna cosa que llame la atención de los militares o me matarán/encarcelarán de seguro. Y si conozco a Arwen, ella también se habrá ocultado en alguna ciudad con una identidad completamente distinta.

Rhine apoya su mano sobre el hombro de Digi.

- Amigo, te prometo que te volverás a reunir con Arwen y Toto antes de que te des cuenta. Y apreciaremos mucho tu ayuda en nuestra misión para detener a la especie enemiga que está dominando Kerberos 18.

- Gracias chicos..¡Tal vez chocar contra su vehículo no fue un accidente sino mas bien plan del destino! Exclamó Digi con alegría, aunque aún se encontraba adolorido por el fuerte golpe.

- Muy bien...solo falta media hora. Dijo Wig

- ¿Media hora para qué? Cuestionaron los demás al unísono.

- Media hora para llegar al restaurante.

Continuará.

Aviso que haré un re-work de K-18 antes de continuar con la historia.

Principalmente para darle mas coherencia y para arreglar unos problemas.
(Uno bastante grande es que escribí esto antes de tener un mapa de Kerberos 18)

El capitulo 1 ya está terminado.

Rhinestone escribió:Aviso que haré un re-work de K-18 antes de continuar con la historia.

Principalmente para darle mas coherencia y para arreglar unos problemas.
(Uno bastante grande es que escribí esto antes de tener un mapa de Kerberos 18)

El capitulo 1 ya está terminado.

¿Lo vas a continuar? ¿Ahora sí voy a salir yo? XD

Ya lo había continuado hace poco, el 27 Agosto, pero nadie lo leyó ()

Y si. Ya desde hace tiempo tengo planeado agregarte a la historia, pero faltan unos cuantos capítulos hasta llegar a tu debut en Kerberos 18, pero te va a gustar.

El capitulo 2 ya está terminado.

Bueno al final leí los capítulos editados. A veces los puntos y las comas no están muy bien puestos pero obviamente está mejor que antes. A ver como sigue

Si. De todas formas estoy conforme con lo que he hecho.

Posiblemente escriba capítulos extra entre los capítulos.

Porque hay algunas partes que están como muy rápidas que pude haber aprovechado mas.

Cuando tenga tiempo haré un capitulo enfocado especialmente al sueño que estaba en el capitulo 2.

¿El mensajero? Interesante ... :suspicious:
Cada vez que recuerdo que la madre esa se llama Esmeralda pienso que es esta http://st-listas.20minutos.es/images/2009-01/77799/920547_640px.jpg?1233171921

-Siempre que, súbitamente, el personaje femenino ofrece una cita o empieza a seducir al personaje masculino que cree imposible que él le pueda gustar a la otra persona-


al menos esa es la sensación que me dio XD